Desratización en Sevilla

Ver una sola rata en tu hogar no significa que tengas una plaga, ahora bien, los roedores tienen hábitos nocturnos y en ocasiones no es fácil percibir su presencia. Los indicios de tener un nido de ratas son si aparece orina y fuertes olores, pequeños excrementos, envases de alimentos rotos o mordisqueados.

Otra forma de saberlo es si oyes ruidos en los techos, conductos o paredes frecuentemente. En el caso de ver crías de ratas o ratones por el día, significa que la actividad es alta y requiere de especialista en desratización para poner fin al problema.

Los roedores debido a su hábitat de suciedad y de alimentarse de todo tipo de desechos y animales muertos, son las causantes de la transmisión de enfermedades zoonóticas a las personas como el hantavirus, leptospirosis, salmonella. Esto se produce por contacto directo con sus orines o heces, pero también por la contaminación de los alimentos a los que puede acceder en nuestras cocinas.

En cuanto a los daños son de diverso tipo, económico si se trata de empresas de alimentación, donde podrían perder toda su mercancía almacenada por roturas de cajas y alimentos envasados.

Otros daños graves que tienen que ver con las infraestructuras es si dañan cableado, tuberías, mobiliario con sus dientes afilados.

Las empresas podrían sufrir sanciones o pérdida de reputación en el caso de detectarse una plaga de roedores en sus instalaciones.

En primer lugar, realizamos un análisis de riesgos y puntos críticos, ayudándonos de un mapa de las instalaciones. Identificamos el tipo de roedor implicado según los indicios que puedan aparecer en el trascurso de la inspección.

Comprobamos el alcance del problema o la infestación, donde proponemos medidas correctivas como la instalación de barreras físicas para evitar la entrada de roedores, sellado de grietas, finalmente el tipo de tratamiento según tu caso.

En el caso de los tratamientos activos, consisten en la localización de los roedores con el objetivo de cazarlos y exterminarlos de forma definitiva. Para ello se utilizan medios mecánicos como trampas o jaulas, y químicos como rodenticidas o cebos atrayentes.

Las soluciones pasivas pasan por la instalación de barreras físicas como burletes en las puertas, sellado de grietas o monitorización con tecnología digital.

Todos los raticidas son tóxicos para personas y mamíferos, por eso están guardados en portacebos bajo llave para que nadie pueda manipularlos. Su colocación se realiza de forma estratégica y en ocasiones no son percibidos.

Estos venenos actúan de forma retardada en el cuerpo de las ratas al interferir en la producción de vitamina K, que es necesaria para la coagulación de la sangre, lo que provoca hemorragias internas dentro del animal produciéndoles la muerte a los pocos días sin que el cebo genere rechazo.

Si le preocupa en exceso la colocación de rodenticidas, podemos optar por la colocación de trampas mecánicas. Pero no siempre son 100% efectivas.

Todas nuestras soluciones cuentan con la garantía. Si contratas mantenimiento anual te aseguras el no tener problemas con los roedores durante todo el año.

En el caso de hogares, contamos con soluciones económicas y ágiles, pero depende en muchos casos del alcance del problema. Por eso hay que diferenciar un problema puntual al de una plaga extendida por toda tu vivienda.

Para empresas, ofrecemos contratos de mantenimiento donde certificamos que el negocio cumple con la ley vigente para la prevención de plagas urbanas. Y el precio depende de las dimensiones de la instalación y los tipos de tratamientos que se utilicen.

La instalación de sensores y cámaras nocturnas para monitorizar roedores permiten conocer su presencia, identificar sus movimientos y nidos, por dónde acceden o qué daños causan, entre otra información valiosa.

Se pueden usar para diagnosticar el problema y decidir el plan de desratización adecuado o para verificar la evolución del tratamiento en casas, comunidades de vecinos, negocios o colectividades con graves infestaciones de roedores.

-Evita a toda costa que los roedores puedan acceder a a la despensa y muebles de la cocina.

-Tira la basura a diario para no atraerlos.

-Instala burletes en las puertas, las ratas tienen un esqueleto que pueden adaptar para poder pasar por pequeños huecos.